Nuestros sabores clásicos
La abuela te envía al cerezo a merendar
Cuando abrimos preguntamos qué aroma relacionaban con cada miembro de la familia, para la abuela el aroma que más se repitió fue la lavanda. También pensamos en lo entrañable de recoger fruta del árbol para merendar unas cerezas.
Así nació nuestro clásico cereza ácida con lavanda.
¿Lo has probado? O lo amas o lo odias pero no deja indiferente a nadie.


El Chocolate
A medida que crecemos y tenemos almacenamos más recuerdos con este sabor, la intensidad va disminuyendo, para tener una sensación parecida a la inicial necesitamos un chocolate muy intenso, con muchos matices, que pueda sorprendernos.
Para ello hemos escogido un chocolate de la casa LUKER de origen TUMACO con un 85% de materia del cacao. Tumaco está situado al este de Colombia, en la zona del Pacífico, es un paisaje muy húmedo que le da mucho aroma al chocolate. Además en Tumaco se cultivan algunas de las especies más antiguas de cacao, manteniendo el sabor original del mismo.
Ven a regalarte este primer momento de nuevo.
Recuerdo del Coco de Liang
La sensación exótica de probar por primera vez comida china fue irrepetible, esas texturas gelatinosas, esos sabores dulces…
Ahora ya estamos acostumbrados y es nuestro restaurante de siempre, por eso queríamos hacer un guiño desde el helado de coco que tenían de postre. Lo hemos llevado a su máxima expresión para que lo disfrutes con este bonito recuerdo.


El Mantecado del Yayo Alfonso
Para recuperar el mismo sabor que él hacía, estuvimos 2 meses cambiando la receta y dándola a probar a aquellos que la conocían. Modificamos muchas veces la intensidad de la yema, de la vainilla… hasta llegar al sabor actual.
Es uno de los sabores que más emociona.
¿Quieres probarlo?
El Banana Split de media noche de la abuela Estasa
Cuando le preguntaban por qué comía cada noche este helado ella decía que llevaba leche y que así dormía mejor.
Este helado gusta muchísimo, no solamente por sus supuestas propiedades que favorecen el sueño, ni por su preciosa historia … el delicioso dulce de leche de la casa Baltar y el plátano natural junto con las crujientes pepitas de chocolate hacen de este helado uno de nuestros básicos.

Nuestros sabores rotativos
El tribut
Observando las formas y el color de La Pedrera escogimos la avellana para representarla como ingrediente principal. Lo combinamos con el agua de mar y el tomillo por ser el mar y la naturaleza fuente principal de inspiración del movimiento modernista. Lo presentamos con un veteado de avellana con chocolate para representar el hierro forjado de los balcones.
Un sabor reinventado para los que disfrutan de los matices.


Recuerdos valencianos de Lucía
Un sorbete precioso como la historia de Lucía.
Sin Eufemismos
El aroma de ella era el de un perfume muy conocido con las notas de inicio de lichi.
Estos ingredientes combinados dan como resultado un sorbete que para describirlo sin eufemismos es el amor hecho helado.
Prueba este helado para descubrir su magia en la escalera de sabores que presenta.


El postre de la tía Ester
Es un postre delicioso que debe reposar una noche en la nevera y se espolvorea con canela a la hora de servir.
Es casi imposible que lleguen enteros al día siguiente dado que en la noche que pasan en frío son muchas las que caen en la tentación de meter la cuchara.
¿Podrás resistir la tentación?
Farigola
El sabor es intenso y delicioso.


Madres de leche y miel con nuestro toque de sal
Esta interpretación helada lleva leche y miel como el título y está acompañado de un toque de sal mostrando el dolor de la protagonista como la sal en las heridas.
El preferido de muchos, descrito a veces con la frase “Es como un abrazo”.
Guadi
Muy buscado y que rápidamente se acaba este helado de pistacho con parte de los azúcares caramelizados para realzar el sabor y un poco de sal para completar el gusto conquista corazones y crea adictos al pistacho.


Inspiración en el cremino de Auréilen
Poco le podemos enseñar a este heladero doctor en física pero ya sabemos que de la sinergia entre amantes del helado salen cosas maravillosas, aquí tenéis el resultado.
Si pasáis por plaza del sol, probad sus helados de flores y de frutos secos.
Veranos en Carrascosa de Haro
Es un sorbete sencillo pero impactante, el sabor del pepino se realza con la sal.
Refrescante y delicioso.


Viaje de las aventuras de Nerea
Su fruta favorita es la fresa y a todo lo que comen le gusta ponerle picantitos o tajín. Tanto le gusta que incluso viaja con sobrecitos para ponérselo a todo.
Este sorbete no solamente tiene un color espectacular y mucho cariño en su historia si no que también el sabor predominante de la fresa con el tajín es espectacular.
El favorito de muchos niños y adultos.
Per sempre
Para Elisabeth los veranos con su familia sabían a higos recién cogidos del árbol, infusiones de tomillo que calentaban el corazón y el agua de mar de las preciosas calas de la costa Brava.


És festa major
En Poblenou cuando celebraban las fiestas del barrio y montaban la feria en la rambla y las calles de alrededor, habían algunas churrerías que impregnaban el ambiente de ese olor a churro recién hecho.
Este helado de churros es el favorito de muchos y despierta la nostalgia de los vecinos del Poblenou.
En la churrería Las palmeras tienen este helado para que lo puedas combinar con un chocolate caliente y un churro recién hecho.
Gelat Mediterrani
Los niños de primero del colegio Voramar cada año hacen un helado de su percepción de un día en la playa.
En el 2024 diseñaron este helado de mango, fresas y agua de mar con una galleta.


Tarazona, un lugar en mi memoria
Sergio vino a Barcelona y estando lejos de su familia, rutinas, casa… y echaba de menos sus paseos por Tarazona, un paisaje de baja montaña llena de tomillo, romero, en las que recogía moras y frambuesas.
Le hicimos un sorbete con sabor a tiempo, libertad y disfrute para alegrarle un corazón.
Actualmente Sergio es colaborador en la Fundació Josep Carreras contra la leucemia y asociación dona médula de
Aragón en la que participa activamente con campañas para ayudar desde su ejemplo y vivencias.
Gospel disco
Los festivales de Gospel en el Casino de la Aliança saben a chocolate, baileys y chispas.
Una combinación que te hará vibrar como el equipazo de Gospel cuando se suben al escenario.


Tardes d’estiu a Formentera
Paula recuerda cuando iba con su familia a las calas de Formentera y después de un largo día en la playa, sacaba luna nectarina de la mochila y la limpiaba en el agua del mar.
El contraste del dulce con el salado hacen de este sorbete un baile de sabores que te transportará a los veranos más bonitos de las baleares.
Rebañar la olla de la bechamel
Cuando abrimos, preguntamos a los vecinos del Poblenou qué aromas y sabores recordaban de su infancia. Algunos de los que más se repetían era el rebañar la sartén de la bechamel cuando estaban haciendo las croquetas o los canelones.
Fué el primer helado que diseñamos en Mamá Heladera y para sorpresa nuestra el favorito de muchos.


Bizcocho crudo con melocotón y rosas
Laura nos contaba los veranos con sus primas en casa de su abuela en el pueblo. Tiene un jardín lleno de flores, con muchas rosas y un melocotonero que desprende un olor mmm…
Les encantaba preparar pasteles y antes de hornearlos metían el dedo en el mix de la masa cruda.
Este helado con yema de huevo, yogurt, aceite y ralladura de limón acompañado de agua de rosas y melocotón es un abrazo para los sentidos.
Septiembre entre Magnolias
Victor le enseñó a Mònica que las magnolias cuando florecen en septiembre huelen muy parecido a la vainilla. En este mismo mes les gusta compartir sus frutas favoritas: albaricoque, melocotón y paraguayo.
Les hicimos su sorbete nupcial con su histora y añadimos la flor eléctrica para sorprender a los comensales con un elemento de la naturaleza.


El tiempo no perdona
Mariana reinterpretó una pai de limón que vió en la tele. Le añadió ralladura de naranja y oreo.
Le quedó tan deliciosa que la dejó en la nevera y le iba dando cucharaditas tan pequeñas para que no se le acabara que se le acabó estropeando.
Aprendió que el tiempo no perdona y que hay que comerse la vida a cucharadas grandes.
El apagón
El día 28 de abril se apagaron todas las luces, los teléfonos dejaron de funcionar… Los vecin@s vinieron a comer helado para ayudarnos a que no se estropeara.
Gracias al pozzetti de glicol nos aguantó el helado en perfecto estado.
Los sabores que más nos pidieron fueron la avellana, el pistacho y el chocolate con leche. Dado que no teníamos nada de esto, para dar las gracias a tod@s los que vinieron a ayudar, hicimos un helado combinando estos sabores en un delicioso helado del recuerdo del día que
nos volvimos a mirar a los ojos.
